Una noche tuve un sueño... soñé que estaba
caminando por la playa con el Señor y, a través del
cielo, pasaban escenas de mi vida.Por cada escena que pasaba,
percibí que quedaban dos pares de pisadas en la arena: unas eran
las mías y las otras del Señor.
Cuando la última escena pasó delante de nosotros,
miré hacia atrás, hacia las pisadas en la arena y
noté que muchas veces en el camino de mi vida quedaban
sólo un par de pisadas en la arena.
Noté también que eso sucedía en los momentos
más difíciles de mi vida. Eso realmente me
perturbó y pregunté entonces al Señor:
"Señor, Tú me dijiste, cuando resolví seguirte,
que andarías conmigo a lo largo del camino, pero durante los
peores momentos de mi vida, había en la arena sólo un par
de pisadas. No comprendo porque Tú me dejaste en las horas en
que yo más te necesitaba".
Entonces, El, clavando en mi su mirada infinita me contestó: "Mi
querido hijo. Yo te he amado y jamás te abandonaría en
los momentos más difíciles. Cuando viste en la arena
sólo un par de pisadas fue justamente allí donde te
cargué en mis brazos". autor
desconocido
ENTREVISTA A DIOS
Soñaba que estaba haciendo una entrevista a Dios.
- ¿Así que quieres entrevistarme?
—Bueno, le contesté, si tienes tiempo...
Se sonríe y dice:
—Mi tiempo se llama Eternidad y alcanza para todo; ¿qué preguntas
quieres hacerme?
—¿Qué es lo que más te sorprende de los hombres?
—Que se aburren de ser niños, apurados por crecer, y luego
suspiran por regresar a ser niños. Que primero pierden la salud
para tener dinero y después pierden el dinero para recuperar la
salud. Que por pensar ansiosamente en el futuro, descuidan su hora
actual, con lo que no viven el presente ni el futuro. Que viven como si
no fueran a morirse, y se mueren como si no hubieran vivido.
Sus manos toman fuertemente las mías y seguimos en silencio.
Después de un largo tiempo, le dije:
—¿Me dejas hacerte otra pregunta?
No me respondió con palabras, sino sólo con la ternura de su mirada.
—Como Padre, ¿qué es lo que le pedirías a tus hijos?
—Que aprendan que no pueden hacer que alguien los ame. Lo que sí pueden
hacer es dejarse amar.
Que aprendan que lleva años construir una confianza y sólo segundos
destruirla.
Que aprendan que no es bueno compararse con los demás.
Que el rico no es el que más tiene, sino el que menos necesita.
Que aprendan que deben controlar sus actitudes, o sus actitudes los
controlarán.
Que bastan unos pocos segundos para construir heridas profundas en las
personas que amamos,
y que pueden tardar muchos años en ser
sanadas.
Que aprendan que perdonar se aprende practicando.
Que hay gente que los quiere mucho, pero que simplemente no sabe cómo
demostrarlo.
Que los amigos de verdad son tan escasos, que quien ha encontrado uno,
ha encontrado un
verdadero tesoro.
Que no siempre es suficiente ser perdonado por otros; algunas veces
deben perdonarse a sí mismos.
Que aprendan que son dueños de lo que callan y esclavos de lo que dicen.
Que de lo que siembran, cosechan. Si siembran chismes,
cosecharán intrigas; si siembran amor, cosecharán
felicidad.
Que aprendan que la distancia más lejos que pueden estar de Mí es la
distancia de una simple oración...
Y que sepan que estoy con ellos
siempre.
Y así, en un encuentro profundo, continuamos en silencio. autor
desconocido